Cuándo guardar silencio…

Dejándome llevar por esas «ansias zen» de descongestionarlo todo que me asaltan de cuando en cuando, he dedicado unos minutos a reflexionar sobre cómo se podría aplicar el principio de «menos es más» a la propia blogósfera. El toque final a la creación de esta entrada, ese «cling» que hacía falta, vino a dárselo el artículo más reciente de mi vecino Jusamawi, en la parte donde habla del silencio, mejor dicho de su escasez en nuestros días. Por esa razón, le corresponde la dedicatoria de esta entrada.

Sucede que para alguien como yo, el silencio es una especie de artículo de primera necesidad. ¡Y caramba qué cierto es lo escaso que se ha vuelto!

En todas partes, en todos los ámbitos, reina un zumbido in crescendo cada vez más universal. La blogósfera no es la excepción, todo lo contrario. Por ejemplo, este fin de semana, leyendo mis feeds –cuya lista ha ido creciendo nuevamente después de la última poda– lo he notado con cierta tristeza…. La causa: una incapacidad manifiesta para evaluar importancias, para ignorar lo banal, para prescindir de lo innecesario.

En general, se publica cualquier cosa y muchas veces –quisiera yo creer que inadvertidamente– se promueve cualquier cosa. Hasta pareciera que algunos bloggers jamás llegan a plantearse la posibilidad de dotar a sus entradas del más mínimo propósito. Como si lo único importante fuera postear, postear, postear, postear, postear, no importa qué ni cómo. Como si sólo importara cuánto y cuan frecuentemente. Como si el único objetivo fuera estar en el medio, que hablen de nosotros, que nos enlacen. Para bien o para mal, pero que hablen y que nos enlacen.

Además, ¿quién debería preocuparse por nimiedades como la consecuencia en el propio pensamiento…? ¿A quién podría importarle si ayer publicamos un artículo promoviendo el silencio y hoy publicamos otro promoviendo la bulla? ¡Hombre! en eso reside precisamente la libertad de expresión, ¿no? Además, «¡es mi blog y al que no le guste, pues que no lo lea!»

Cuando sale un nuevo artefacto al mercado, un nuevo software, una nueva herramienta, dependiendo de la magnitud del estreno cada blogger escribe entre una y tres entradas anunciando el lanzamiento por llegar. Luego, dos o tres entradas más (nuevamente por blogger) con los informes «en tiempo real» del evento en sí del lanzamiento. Entonces, cada blogger nos obsequia con otras dos o tres entradas –y hasta cuatro o cinco si se siente realmente inspirado– con recuentos detallados de todas las desventajas, fallas y deficiencias del producto. Sólo con mucha, mucha suerte, logramos encontrar una o dos entradas en total explicando las ventajas de aquello que acaba de ser lanzado o para qué puede servirnos a nosotros, simples mortales de la lejana periferia de la blogósfera tecnológica….

¿Cuántas de estas entradas eran necesarias; cuántas, prescindibles; cuántas, simple «ruido»? Y más importante aún ¿quién podría o «debería» determinarlo?

Este artículo no pretende ser más que una invitación al silencio, cuando el silencio llena mejor el vacío que una entrada.

¿Y qué es el silencio? En un blog, son esas entradas que no publicamos, o las que ni siquiera escribimos. Son también aquellos elementos del diseño o de la navegación que eliminamos o que nunca llegamos a incluir. En una entrada, son aquellas cosas que nos abstenemos de mencionar, las que callamos, sin necesariamente otorgar nada. El silencio y su hermano el espacio, son elementos sin los cuales la creación de cualquier tipo resulta sencillamente imposible.

Aunque estoy completamente conciente de que hay toda una corriente de bloggers que consideran lo contrario; en mi humilde opinión, un blog es algo que hacemos para otros, no para nosotros mismos. Un blog, para mí, es una interminable página en blanco en la que nos ocupamos de alternar palabras y silencios, vacíos, imágenes y hasta sonidos, en procura de construir algo que pueda ser útil, valioso o simplemente hermoso para alguien más, a través del tiempo. Un blog no debería ser ni parecer un basurero ni un «Muro de los Lamentos» ni un desván repleto de objetos de dudosa procedencia y utilidad; ni para el blogger, ni para sus lectores, ni mucho menos para la blogósfera nuestra de todos los días.

Como en el yin y el yang, el sonido y el silencio, el vacío y la materia; la armonía entre estos opuestos es fuente de placer para muchos y hasta necesidad vital para unos cuantos de nosotros.

¿Y tú, querido lector/a qué piensas? ¿Cuándo deberíamos guardar silencio?

12 pensamientos en “Cuándo guardar silencio…

  1. Karen, cada ser humano es un universo que palpita y se mueve en su propio ritmo y necesidad de “expansión”, somos tan distintos a pesar de estar tan unidos. El mayor problema que se da, creo, porque de nada estoy seguro, salvo como decía Einstein, a que el universo es infinito y de la estupidez humana, y del Universo no estoy seguro, es sobrevivir a nuestra propia urgencia de ser aceptados, emocionalmente y como individuo.

    La creación de un blog para mí ha sido un hallazgo, como alguna vez te mencioné, partió como una necesidad de espacio donde almacenar algunas de mis reflexiones, luego parte de mi trabajo literario y que esa voz llegará de alguna forma a miles de mujeres, de distinto nivel cultural y espiritual pero que buscan respuestas, que quieren sentir que hay otras mujeres que piensan, sienten como ellas.
    Como es inevitable todo tiende a la expansión y de pronto permites (por estar en los “estados de inconciencia involuntaria que todos los seres humanos pasamos) a que éste animal te coma con sus fauces ilusorias, así me sucede y seguramente pasará mil veces más.

    Leí atentamente tu pots anterior de limpieza de blog, y como Jusamawi traté de limpiar el mío y quite algunas cosillas pero luego me di cuenta que no quiero limpiarlo más, quiero tener los RSS de mis amigos porque puedo ir a leer cuando postean algo nuevo por el sólo placer que me provoca leer gente que me interesa profundizar, mis fotos (de India) tal vez sobren pero ni modo, me gusta verlas ahí acariciando mis ojos con toda su pobreza y con toda su magnificencia, te das cuenta?, tal vez “pesen” pero si quisiera mucho tráfico (que no veo la ganancia) postearía cualquier barbaridad como lo hacen miles de blogs, para qué?

    EN cuanto al silencio que tan oportunamente mencionas en este pots, creo que nace espontáneamente, pero concuerdo plenamente contigo en que tal vez debiera darse aún más, de eso no cabe duda, el silencio es tan sano cuando no hay nada inteligente que decir.

    Me encanta leerte cuando reflexionas, un abrazo.

  2. Hola Karen. Soy Cris. ¡Qué bonita entrada!

    Ayer precisamente pensaba acerca de todo esto. Nosotros también creamos este blog con la intención de que fuese un espacio en el que aportar granitos de arena que puedan ayudar a quien lo lea.

    A veces veo cosas que si me dejara llevar, sacarían entradas críticas, despiadadas, negativas, pero ¿sabes qué? creo que de eso ya hay bastante en la blogosfera, en la televisión y en el mundo en general así que cuando me pasa eso guardo silencio hasta que puedo transformar eso en una entrada con un punto de vista positivo, con una alternativa o algo que ayude, no que destruya.

    También guardo silencio cuando un día no me siento positiva y sé que no voy a poder dejar en mi blog, o en otro blog que visite algo que aporte realmente, sino esos pensamientos negativos que a veces nos acosan y como sé que no soy yo… espero a «volver» para sentarme a escribir.

    Así que me he sentido totalmente identíficado cuando he leido lo que dices en tu entrada que es el silencio en un blog, y para mi si que existe y lo agradezco. Agradezco entrar en algunos blogs que sé que sólo me van a aportar cosas buenas y que seguro sus creadores han realizado ese ejercicio (que a veces no es sencillo) de transformar el punto de vista para que el resultado sea una contribución.
    Gracias por tu silencio.

  3. No quisiera ser polémico pero parece por lo que leo en el comentario de Cris (Hola Cris) que las críticas o las denuncias no aportan nada positivo.Eso no lo comparto.A veces decir lo que una piensa no es agradable de oir.La cuestión es decidir si en ese momento es conveniente decirlo o no. Todos nos hemos encontrado en situaciones en las que hemos optado por callar en vez de de hablar. Si el motivo por el que lo hacemos es por buscar un bien mayor, me quito el sombrero.En otras situaciones, de injusticia flagrante y sangrante,sin embargo,el terrible pecado que cometemos es quedarnos callados y en muchas ocasiones mirando para otro lado.Incluso aunque no podamos proponer una opción diferente tenemos la obligación moral de denunciar lo que nos parece injusto.Hay temas en los que no se puede tener piedad.Pensemos por ejemplo en los poderes públicos.Otro tema que es primo hermano de este silencio del que hablamos es el del respeto.Estoy cansado de escuchar a gente decir que respeta lo que el otro dice.¡No! No podemos permanecer en silencio cuando una idea u opinión nos parece mal.Las personas merecen respeto, las ideas no son todas respetables y no vale el silencio en esos casos.

    Muchas veces nos arrepentimos de haber hablado,Pero no olvidemos las ocasiones en que hemos también lamentado habernos quedado callados.

    Una vez dicho esto me callo.

  4. Hola Jusamawi. Creo que no me he explicado del todo.
    Estoy absolutamente de acuerdo contigo en que las injusticias deben ser denunciadas: de hecho en mi blog hay varias entradas que denuncian los malos tratos a las mujeres, el terrorismo de la banda ETA o lo ocurrido a los monjes tibetanos entre otras… lo único que ocurre es que no me gusta hacer una entrada en la que sólamente cuente lo mal que está todo. Eso no quiere decir que yo piense que el mundo está fantástico, que no hay problemas, o que toda la gente es felíz (para nada). Lo que si pienso es que se puede hacer algo para cambiarlo, así que además de denunciarlo intento dar un punto de vista positivo al respecto. No sé, pienso que cuando veo un telediario o un periódico se me queda un mal cuerpo que no veas y no me entran ganas de hacer nada, sólo me quedo angustiada, y con la sensación de que no se puede hacer nada. Sin embargo cuando leo algo de cualquier persona que está haciendo alguna actividad que ayude a cambiar esas situaciones me entran ganas de remangarme y echar una mano.
    Así que creo que la crítica siempre y cuando sea constructiva ayuda un montón pero cuando no lo es…
    Hay personas que hacen críticas de cosas concretas y cómo piensan que se podrían mejorar y hay otras que hablan de generalidades y dicen que TODO es malo, TODO está mal, NADA puede cambiar… Con eso no estoy de acuerdo para nada y con el sentimiento que provoca todo eso menos aún.
    Así que creo que nuestras opiniones no son tan distantes ¿no crees?
    Un saludo. Cris.

  5. Patricia, así es, aunque poniéndome estricta con los términos, yo diría que somos no un universo, sino los creadores de nuestros respectivos universos. Y sí, es maravilloso contemplar la diversidad tan grande que hay entre nosotros ¡es increíble! Tanta, pero tanta y tanta gente y no hay ni siquiera DOS entre los seis mil millones que poblamos este planeta que sean iguales ¿te imaginas?

    Como te comentaba en tu blog, hace un ratito, la idea no es callar la música, ni la brisa, ni los pajaritos, ni las estrellas. La idea para mi, al escribir esta entrada al menos, es prescindir del ruido. De la bulla. De todos los sonidos innecesarios que encontramos en la blogósfera. ¡Por supuesto que no quiero que se callen mis amigos! Esa no era la idea, al menos. Por otra parte, como le comentaba al propio Jusamawi en la entrada a la que te refieres, el «minimalismo» no es una obligación ni puede serlo nunca. Pienso que tampoco es para todo el mundo en la misma medida o en el mismo momento. O sea que tus hermosas fotos se quedan, no te preocupes. :-)

    Cris, gracias, qué bueno que te ha gustado esta entrada. Sabes, fue todo un proceso. Porque en realidad, aunque escribí que me había «entristecido» un poco con mi feed el fin de semana pasado, pero la verdad es que me molesté, me enfurecí, para ser más específica. Porque cuando terminé de revisarlo todo, habían pasado dos horas y media ¡de las cuales no había obtenido nada, excepto enrabiarme por 2 o 3 cosas que leí que me enojaron más aún…! Y aunque, claro, la molestia principal era conmigo misma, por haberme puesto a perder miserablemente el tiempo, pues, igual quieres pegarle a alguien o algo… Entonces, me pongo a escribir. Y quizá (no estoy muy segura) a diferencia de Jusamawi; yo, exactamente igual que tú, que no debo simplemente gritar y darle dos puñetazos y cuatro patadas a la pobre pared. No. Tengo que –como tú dices– transformar ese impulso en una entrada con un punto de vista positivo, con una alternativa o algo que ayude. ¡Es exactamente así! No sé si lo logré o no, pero lo intenté al menos, de corazón. Un besote para ti.

    Jusamawi, no quiero «comprar pleitos ajenos», así que me conformo en este caso con disentir en la última parte de lo que dices: Yo sé que esto puede sonar bastante raro, pero yo pienso que las personas no son tan diferentes de las ideas. La diferencia mayor es que la mayoría de las personas tienen un cuerpo y la mayoría de las ideas, no. Pienso que hay un número (pequeñísimo, pero existente) de individuos muy poco respetables a mi entender; exactamente igual que las ideas que promueven. No es cierto que Mussolini merezca mi respeto, pero el fascismo no, por ejemplo. Claro, yo sé que tú no quisiste decir eso tampoco, son sólo ganas irresistibles de polemizar un poco. ;-)

  6. ¡Hola cuarteto mortal! (quinteto, conmigo) Fabulosa entrada Karen. Como yo tengo el inmenso privilegio de tenerte «en vivo», pues me tocan algunas primicias… ya habíamos hablado de esto hace unas semanas; de hecho, yo misma estuve bastante «offline» en las últimas semanas, como sabes, al menos en lo que a mi blog concierne, pero ya he regresado. Fue muy bueno el silencio de cumpleaños, me siento «recargada». Pero la entrada está super, no es exactamente como lo hablamos, está muchísimo mejor. Y pienso que sí lograste tu objetivo de que no sólo fuera crítica.

    Sin embargo, entre la posición aparentemente crítica de Jusamawi y la posición apartentemente acrítica de Cris hay una alternativa que no se ha contemplado en la discusión y quiero que sea mi aporte.

    Y es la de la crítica artística o estética.

    ¡¡¡Sí!!!! Cuando logramos convertir la protesta, la denuncia, la crítica etc. en una obra de arte, hemos logrado algo que pertenece casi exclusivamente al reino de lo divino. ¿A qué me refiero con esto de «crítica estética»? Bueno, hasta donde yo sé, acabo de inventar el concepto, así que aún no tengo la definición, pero sí un ejemplo: para muestra, un magnífico botón, (no sin un ligerísimo toque de humor).

    ¡Que viva la polémica!

  7. Cris, ahora te entiendo mejor y nuestras posturas se acercan. Lo único que me da miedo de hacer una crítica constructiva ( la ideal) o callar, es que demasiadas veces somos excesivamente permisivos. Un lamento, una queja o un puñetazo sobre la mesa son a veces mejores que un silencio. Sabes perfectamente que mucha gente considera que el que calla otorga y esto no se puede permitir.

    Karen, yo respeto menos a musolini que a una boñiga de vaca. Lo que quiero decir es que yo no puedo aplastar o eliminar al susodicho por el mero hecho de no comulgar con sus ideas. Sin embargo no tendría escrúpulos en borrar de la faz de la tierra todas las palabras que salieron de su sucia boca. De la misma manera yo respeto a las personas que profesan otras religiones pero nunca permitiría la ablación del clítoris por mucho que en otra cultura se considere normal.

    Milla, la crítica estética implicaría hacer y decir algo sorprendente, con valor por si mismo.Sería una críca maravillosa pues valdría independientemente
    del objeto criticado. No tengo el libro a mano (no estoy en casa) pero Oscar Wilde escribió un texto muy interesante al respecto. Se titula «El crítico como artista».

    En cuanto al vídeo que adjuntas, lamento decir que a la velocidad a la que navego estos días por internet (desventajas de vivir temporalmente en el desierto) podría peinar canas antes de verlo, escucharlo y comentarlo.

    Un saludo para las tres.

  8. Querida Karen, no te preocupes que tu pots, esta excelente, mi decisión de callar un poco es porque tenías toda la razón y me ha pasado como a ti, de pronto siento que he gastado minutos que se convierten en horas leyendo cosas que no me aportaron nada, tratando de escribir algo para pegar por el sólo hecho de postear algo, o recurro a escritos antiguos por mantenerlo en movimiento, tal vez esto último no sea un mal recurso pero en realidad no quiero hacerlo salvo se justifique. Asi que tranquila, que sólo me hiciste ver lo que estaba ahí.

    Y en cuanto la maravilla de la no similitud, sí, es asombroso pero tampoco hay que olvidar que a pesar de ser tan, pero tan infinitamente distinto, estamos tan unidos y en lo escencial, somos tan iguales, tal vez caminamos por distintos caminos y vamos tomando lo que en él encontramos y eso marca la tan notoria diferencia.

    Milla, Jusamawi, Chris, he entrado en silencio a leerlos y siempre me siento agradecida de la red y me digo, hay tanta gente valiosa.

    Jus, espero que tu desierto te de esa quietud que tanto te gusta y que las estrellas te hablen fuerte para que acallen el pensamiento.
    Un abrazo a todos. :)

  9. ¡Hola a todos!
    Otra vez lo has hecho Karen… me encanta el giro que le has dado al blog y este espacio de tertulias ¡felicidades!

    Jusamawi me alegro de que nos entendamos mejor, seguiremos hablando…

    ¡Qué bueno el video Milla, cuando lo he visto he pensado ¡qué bruja! (en el buen sentido de la palabra claro…) para mí has dado en todo el clavo, y encima Joan Manuel. ¡Gracias por el regalito del video! y a ti Binah por el remanso de paz.

    Un beso para todos. Cris.

  10. Yo sigo diferentes bitácoras a través de Netvibes y eso me supone que de vez en cuando tengo más de 600 entradas por leer de un día para otro. Las agrupo por temáticas y muchas veces me encuentro que, por ejemplo, si en un grupo tengo 30 bitácoras y solo leo las 5 nuevas entradas de cada una, me doy cuenta de que la mayoría repiten una y otra vez las mismas noticias (en algunos casos son casi idénticas).
    Yo estoy suscrito a varias fuentes y me puede llegar a molestar, pero entiendo que hay gente (creo que la mayoría) que estará suscrita a muchas menos fuentes o tan siquiera sabe lo que es eso de una fuente o feed. Eso provoca que esta gente si no lee esa noticia en esa bitácora que de vez en cuando va, no se llegará a enterar.

    ¿Eso justifica que tooooodo el mundo tenga que repetir la noticia en cuestión? Bueno, los periódicos lo hacen, ¿por qué no los «bloggeros»?

    No sé si me he explicado bien, algunas veces no me entiendo ni yo.

  11. ¡¡¡Dios mío!!! ¡600 de un día para otro! ¡Increíble!

    Me parece muy interesante tu pregunta, Lynze, se trata precisamente del punto de esta entrada: tratar de prescindir de lo prescindible.

    Yo pienso que es CASI inevitable que algunas noticias –por su importancia– se repitan de blogger a blogger. Ahí es uno como lector quien tiene que escoger cuál de ellas va a leer. Ahora bien, hay personas que tienen blogs (yo no los honraría con el título de blogger) que «escriben» sobre lo que todo el mundo está escribiendo, con el único objetivo de obtener tráfico. Naturalmente, como no les interesa DAR nada, sólo RECIBIR, pues no es mucho lo que uno como lector obtiene de un blog como ese.

    ¡Gracias por tu visita!

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